La falta de trabajadores para cubrir determinados puestos, las llamadas vacantes, son un grave problema del mercado laboral español. CEPYME ha profundizado mediante este Informe en esta cuestión señalando que el mercado laboral español adolece de un problema acuciante para las empresas: la dificultad para casar la oferta y la demanda de trabajo.
Esta característica del mercado laboral español se torna especialmente paradójica si atendemos a que, junto con Grecia, España es el país con mayor tasa de paro de la Unión Europea.
En este desacople entre la oferta y la demanda de empleo subyacen causas demográficas, cambios culturales y sociales y razones educativas. Entre ellas, la despoblación de grandes zonas del país, el soporte familiar, y en algunos casos los subsidios, reducen la urgencia por la colocación, la escasa intermediación de los Servicios Públicos de Empleo (SEPE) y una educación pobre en perfiles tecnológicos, técnicos, o poco habituada a la formación continua.
Son varias las consecuencias que surgen de esta debilidad del mercado laboral español: lastra tanto la producción como la productividad, dificulta la plena utilización de los bienes de equipo, reduce las posibilidades de relevo generacional en las empresas familiares, provoca otro obstáculo para el crecimiento de las pymes e, incluso, produce cierres de empresas, pérdida de proyectos y una diáspora del tejido productivo de las zonas despobladas hacia las más dinámicas, sin que ello evite que también se produzcan vacantes en las provincias con mayor actividad económica.
El problema es de importancia capital para un país con un 11,6% de paro, según la última Encuesta de Población Activa (EPA) publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Este Informe fue presentado el pasado 18 de septiembre mediante la celebración de una jornada en la sede de CEOE, a la que asistió CONAIF. Se adjunta informe completo obtenido a través de CONFEMETAL